Siempre es bueno caminar. Si lo haces sola , preocura ponerle una sonrisa a cada paso y evita que se te pierdan lágrimas en el camino. Evita hacerlo porque recuerda que estoy detrás tuyo y tarde o temprano las encontraré.
Nunca me fui, siempre me detenia y te miraba. Quizás no de cerca y quizás no presente. Pero lo hacia desde lejos y temeroso.
Nunca me fui, siempre caminaba y lo hacia atrás de la estela que dejabas. No porque no podia igualarte el paso; sino porque queria asegurar la caídas del camino.
El problema radicó en que te llamé y no volteaste. En que mis gritos de auxilio solo sonaban en mi cabeza. O puede que solo te preocupaste por llamarme imaginando que estaba delante; pero no te tomaste el tiempo de ver lo que dejaste atrás.
Hoy no quise despedidas ni sermones, ni lágrimas ni perdones. Porque un abrazo compensaba el tiempo caminando detrás.
Y perdona si lo mio fue atrevimiento, no es facil decir adiós.
Pero tampoco lo es olvidarte
Nos vemos en otros 5 meses Romina
MAX